Este escrito que leerán a continuación fue escrito por un gran amigo, el cuál me pidió este espacio para poder publicar su pensamiento.
No nos olvidemos de Fuentealba, el fue una persona que fue asesinada por luchar defendiendo sus ideales.
Amigos, deleitense con la verdad y la memoria.
El día viernes 4 de abril se cumplió un año del asesinato del compañero Carlos Fuentealba. En su momento la versión oficial del hecho fue (y lo seguiría siendo de no ser por la presión popular) "exceso departe del personal policial", como siempre se suele caracterizar cuando la responsabilidad proviene de las altas esferas del poder estatal.
Todos sabemos que no fue un "exceso", sino un asesinato departe de las fuerzas especiales del estado con el fin de escarmentar al docente en lucha, un mensaje mafioso dictado por Jorge Sobisch “100% listo” (para fusilar docentes), “Si salís a la calle a romper las pelotas mira lo que te va a pasar”.
Sobre las acciones que íbamos a tomar en conmemoración del hecho el pasado viernes, en la institución educativa en la cual cursamos nuestros estudios terciarios (que en gran mayoría fueron frustradas), un compañero me dio a entender, respetuosamente que el reclamo del centro de estudiantes era una mala utilización de su imagen, al utilizarla como “bandera” para cortar la avenida y reclamar por mejoras en la educación y salarios docentes entre otras cosas, que la mejor manera de recordarlo era “laburando”. En un principio disentí sobre la observación, pero admito que en su momento no le puse demasiada atención, pero una vez llegado el fin de semana luego de observar una propaganda en el diario página 12 anunciando la emisión de un documental homenaje en el canal encuentro (propiedad del ministerio de educación) que aclaraba ser "sin pretensiones de aportar pruebas a la causa ni realizar denuncias" a lo cual yo me pregunte y "como carajo querés hacer un homenaje a un tipo cuyos asesinos siguen impunes sino es denunciando”, me hizo reflexionar una vez más sobre el punto en cuestión que hubiera remarcado el compañero un día anterior. Es verdad que hay una apropiación de la imagen del compañero Fuentealba, pero en este caso la misma no era de un centro de estudiantes ni de una agrupación piquetera “buscando mártires”, sino de quienes detentan el poder político. Esa imagen de Carlos Fuentealba en las páginas de un diario oficialista, castra de todo posible contenido político que puede tener su imagen y que no es otra que la que emana de la lucha que llevo en vida a favor de la mayoría popular, convierte a la persona en una foto, como una imagen perteneciente a alguien que nunca tuvo vida, “un mito”, y sino, (como diría Atahualpa Yupanqui en una conocida canción) pregúntenle al Che, que de eso sabe mucho.
Fuentealba pertenecía al gremio Aten, un gremio docente neuquino combativo que pelea en las calles no desde una oficina arreglando salarios de indigencia con el poder de turno, como otros de los tantos gremios burocratizados que existen en la Argentina. Fuentealba fue fusilado manifestándose en la calle por mejoras en la educación y el salario docente, y si vamos a rememorarlo no tiene que ser (al menos ese día) “laburando” en las aulas, por ser eso exactamente lo que el no hizo ¿Qué, no laburo? Claro que laburo, pero cuando resultaba necesario salir a la calle a exigir, lo hacía, nunca en la historia el pueblo consiguió algo quedándose sentado en su sitio de trabajo, solamente con la presión popular el gobierno cede, nunca al revés. Por algo luchaba, por intereses que el gobierno no comparte, ellos sí que están usando su imagen, para transformarlo en una imagen de remera, el campo popular no.
Raúl Ferrol
martes, 8 de abril de 2008
"Carlos Fuentealba, docente asesinado por luchar".
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4 comentarios:
Ferrol, amigo mío, comparto con vos, la lucha no se hace cruzado de brazos siempre hay que defender los derechos propios y los ajenos, gracias al "yo no me meto" o "algo habrán hecho", hubo treinta mil desaparecidos, no queremos ser el próximo Fuentealba, ni Jorge Julio López, en este país todavía hay que laburar mucho, esperemos poder salir adelante.
Leandro.
Excelente comentario.
Cuando la violencia está monopolizada, todos los qe no participamos de ello las sufrimos.
Como futuros docentes, Carlos Fuentealba es y debe ser un modelo en cuanto a su labor dentro y fuera del aula, al no conformarse con lo poco qe se da y al no dejarse avasallar por las amenazas y la represión.
Así como con el Che, y también con los desaparecidos de la última dictadura, son símbolos populares qe la clase dominante va a apropiarse con el fin de neutralizarlos para dejar de hablar de lo qe pretendían hacer.
Qe no pase lo mismo con Fuentealba.
La forma de mantener como símbolos vivos a todos ellos es seguir con los reclamos y las aspiraciones qe tenían en vida.
Gracias Ferrol por tu reflexión!
Ferrol Querido, siempre tus reflexiones me dejan sin aliento. Coincido en que el mejor homenaje para el compa�ero Fuentalba es el trabajo y la movilizaci�n para demostrar que nunca estaremos muertos.
El trabajo que se pretende hacer es de hormiga pero que en el largo plazo dar� sus frutos.
Saludos a todos!!!!
Gatogus.
Ferrol, nunca más de acuerdo contigo!! Lo que pasa es que algunas cosas cuesta verlas en el apurón del día a día...cuando se apropian de la imagen de alguien y de pronto y de repente lo convierten en héroe (parece que es lo único que necesitamos, héroes) le niegan su condición humana. Y la condición humana de Fuentealba era que necesitaba comer, y vestirse, y tener una casa digna, y no se lo permitieron. No le permitieron lo más humano de todo, que es vivir, los mismos que después salen a hablar de derechos humanos.
Ojalá no nos olvidemos de esto...y que más que escarmiento sea un incentivo!!!
Bel
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